Joker: Folie à Deux acaba de estrenarse y ha dado que hablar. Se trata de la secuela del éxito de Todd Phillips de 2019, aquella en la que vimos a Joaquin Phoenix clavar esa inquietante interpretación del Joker. Pero esta vez es… diferente, y no de la manera que todos esperaban. Intenta algo atrevido -mezclar la oscuridad que tanto nos gustó con números musicales- y, sinceramente, el resultado es un poco desigual. A algunos les gusta, ¿a otros? A otros no tanto.
Un Gran Cambio de Ritmo
De entrada, Folie à Deux no se parece en nada a la original. ¿Recuerdas lo crudo y real que era el descenso a la locura de Arthur Fleck en la primera película? Sí, eso ya no existe. Ahora es más surrealista, casi juguetón a veces, mientras Arthur navega por la vida en el Asilo Arkham y se enamora de Harley Quinn (interpretada por Lady Gaga). El aspecto musical, aunque ambicioso, resulta algo inconexo. No golpea tan fuerte como el original, que trataba sobre las enfermedades mentales y cómo la sociedad falla a gente como Arthur. En cambio, las partes musicales la hacen más ligera, pero también menos impactante.
Lady Gaga se Roba el Show
Pero hablando de Gaga, es increíble. Su voz es impresionante en las escenas musicales, aportando mucha energía a la película, lo cual es necesario porque el Arthur de Joaquín sigue siendo ese personaje tranquilo y melancólico. ¿El único inconveniente? Su personaje no recibe el protagonismo que merece. Gaga brilla, sin duda, pero acabas deseando que tuviera más protagonismo o que el guión le diera más profundidad.
Los Números Musicales: Aciertos y Errores
En cuanto a los números musicales… Están un poco divididos. Algunos son muy creativos y divertidos, ¿pero otros? No son nada del otro mundo. Una escena que parece encantar a todo el mundo es este salvaje momento en el juzgado con un personaje llamado «Sr. Puddles». Es extraño, pero en el mejor sentido posible. Pero en general, el estilo musical puede echar para atrás a los que esperaban las vibraciones intensas y oscuras del primer Joker.
La Trama… Se Cae en Pedazos
En cuanto a la historia, la película tiene problemas. Es como si no pudiera decidir lo que quiere ser. La primera película parecía una inmersión profunda en la mente de Arthur y los sistemas rotos que le rodean, pero ¿esta? Da la sensación de que va de una escena a otra sin un enfoque claro. La salud mental sigue siendo un tema, pero esta vez no es tan agudo ni invita a la reflexión. Además, con más de dos horas, el ritmo se alarga. Es un poco pesado, con todos esos cambios de tono, de oscuro a divertido y de romántico a musical, que te dejan un poco confuso sobre lo que está pasando.
Preciosos Efectos Visuales
Algo en lo que la película acierta es en su aspecto. Es visualmente impresionante. Los colores contrastan con la crudeza de Arkham, y algunas escenas son simplemente preciosas. Incluso hay algunos momentos animados que parecen dibujos animados de la vieja escuela, añadiendo ese aire triposo y surrealista. Pero, de nuevo, es como si estas elecciones artísticas fueran geniales de ver, pero no compensan el hecho de que la historia no termina de cuajar.
Reflexiones Finales – Sentimientos Encontrados
Así que sí, Folie à Deux es extraña. Asume riesgos y, aunque algunos valen la pena, otros te dejan rascándote la cabeza. Gaga destaca, y la película es visualmente impactante, pero la historia es donde se queda corta. Algunos aprecian lo diferente y atrevida que es, mientras que otros piensan que es un poco decepcionante, especialmente después de que la original pegara tan fuerte.
Al final, esta película no es una simple secuela, sino más bien un experimento salvaje sobre el amor, la locura y la superación de los límites. ¿Funciona o no? Bueno, eso es discutible.