Skip to content
Get our Newsletter
Paramount Pictures

Top “Misión: Imposible” – De la mejor a la peor


Prepárese para abrocharse el cinturón, porque estamos a punto de recorrer a toda velocidad los momentos más adrenalínicos de la franquicia Misión: Imposible. El Ethan Hunt de Tom Cruise ha protagonizado algunos de los momentos más electrizantes de la historia del cine de acción. Con la llegada del estreno mundial de Misión: Impossible – The Final Reckoning (2025), analicemos las seis películas que han consolidado esta serie como el estándar de oro del espectáculo puro y duro.

1. Misión: Imposible – Fallout (2018)

Simplemente el pináculo de la acción contemporánea. El director Christopher McQuarrie hilvanó una narrativa increíblemente ajustada -Hunt y su equipo de la IMF compitiendo para evitar que el armamento nuclear caiga en las manos equivocadas- mientras desataba una pieza de set tras otra que todavía deja mandíbulas en el suelo.

  • Acrobacias icónicas: Tom Cruise pilotando un helicóptero por un estrecho valle de montaña; una increíble persecución en moto por las calles de París; el agente de la CIA de Henry Cavill enzarzado con Hunt en una pelea en el baño de proporciones épicas.
  • Por qué funciona: Cada momento sirve tanto para la historia como para el espectáculo, equilibrando las verdaderas apuestas emocionales con la emoción de una superproducción.
  • El legado: Con casi 800 millones de dólares en la taquilla mundial, Fallout demostró que la planificación cuidadosa, los efectos prácticos y el compromiso inquebrantable de Cruise de hacer sus propias acrobacias siguen siendo una fórmula ganadora.

2. Misión: Imposible – Protocolo Fantasma (2011)

Cuando el FMI es «desautorizado» y forzado a salir de la red, Brad Bird -sí, el director de Pixar- trajo un nuevo estallido de energía a la franquicia con Protocolo Fantasma. Esta entrega revitalizó la serie, demostrando que podía evolucionar sin dejar de ser fiel a sus raíces en el espionaje.

  • Lo mejor: Cruise escalando el Burj Khalifa de Dubai, sin pantalla verde, con una autenticidad que revuelve el estómago.
  • Química de equipo: El mago de la tecnología Simon Pegg y el avispado agente Jeremy Renner aportan ligereza y corazón, transformando lo que podría haber sido una exhibición en solitario de Cruise en una auténtica aventura de conjunto.
  • Por qué gusta: La película combina tan bien el humor, el suspense y las escenas asombrosas que parece un álbum de grandes éxitos de todo lo que nos gusta de la serie.
  • Lo peor: El villano no está a la altura del resto.

3. Misión: Imposible – Rogue Nation (2015)

Christopher McQuarrie volvió a ponerse detrás de la cámara para presentar Rogue Nation, una fascinante mezcla de sofisticados giros narrativos y acción de primer nivel. Aquí, el tenebroso Sindicato emerge como una amenaza que ni siquiera Hunt puede eludir por sí solo.

Secuencias inolvidables:

  • Un atraco bajo el agua en el que Hunt aguanta la respiración mucho más de lo que cualquier ser humano debería.
  • Una persecución en moto por las estrechas callejuelas de Casablanca.
  • Una infiltración de suspenso en la ópera que juega al gato y al ratón a 30.000 pies de altura.

El efecto Ilsa: La Ilsa Faust de Rebecca Ferguson inyectó a la serie una contrapartida moralmente ambigua y ferozmente capaz a Hunt, convirtiéndose rápidamente en el material favorito de los fans.

Por qué resuena: Rogue Nation logra el equilibrio perfecto entre el espionaje cerebral y los fuegos artificiales de la superproducción, demostrando que la franquicia podía ser más inteligente y seguir sobrealimentando la acción.

Lo peor: Le falta un clímax más potente.

4. Misión: Imposible – Dead Reckoning Part One (2023)

Dividiendo su gran final en dos imponentes capítulos, la primera mitad -Dead Reckoning Part One- sube la apuesta con una IA malvada conocida sólo como «La Entidad». A pesar de sus casi tres horas de duración, la película mantiene un ritmo vertiginoso, combinando la paranoia de la alta tecnología con un impresionante trabajo de acrobacias.

  • Una amenaza de IA capaz de manipular sistemas de vigilancia y armamento y datos que alteran el mundo, con Ethan Hunt atrapado en el ojo de la tormenta digital.
  • Evolución de la acción: Desde una impresionante secuencia en tren a toda velocidad por Europa hasta un trepidante salto en moto por un acantilado romano, las acrobacias resultan novedosas y, en cierto modo, más audaces que nunca.
  • Por qué es esencial: Incluso como Primera Parte, establece la complejidad narrativa mientras derriba constantemente las expectativas de lo que puede ser una superproducción de acción moderna.
  • Lo peor: Ser “mitad de historia” le resta peso narrativo.

5. Misión: Imposible (1996)

Pocas son las primeras películas que logran su objetivo, pero la original Misión imposible de Brian De Palma lo consiguió: Imposible de Brian De Palma. Adaptando la clásica serie de televisión de los 60 a un thriller elegante y cerebral, sentó las bases para todas las películas de la franquicia desde entonces.

  • Engaños clásicos: El legendario atraco a la cámara acorazada de la CIA -Ethan colgando de un cable casi en silencio- sigue siendo una de las secuencias de suspense más elegantes del cine.
  • Espionaje con estilo: De Palma infundió a la película una tensión hitchcockiana, entretejiendo dobles traiciones y cambios de lealtades en una trama que te mantiene expectante hasta el último fotograma.
  • Por qué perdura: Incluso con películas más modernas que superan los límites técnicos, el ritmo, la dirección y el factor de frescura de la original la mantienen tan atractiva hoy como en su estreno en 1996.
  • Lo peor: Su ritmo pausado puede sentirse anticuado hoy.

6. Misión: Imposible III (2006)

J.J. Abrams se sentó en la silla del director para dirigir Misión: Imposible III, un capítulo más descarnado y personal que explora las vulnerabilidades de Hunt tanto como sus virtudes.

  • Núcleo emocional: Por fin vemos la vida de Ethan fuera de la FMI -su relación, sus miedos, sus planes de boda-, lo que hace que la acción tenga más fundamento y carga emocional.
  • Villano memorable: El Owen Davian de Philip Seymour Hoffman es a la vez refinado y sádico, un adversario aterrador que eleva cada enfrentamiento con una imprevisibilidad escalofriante.
  • Por qué es importante: Al combinar el espectáculo de una superproducción con auténticos desafíos personales, demostró que la franquicia podía ir más allá de la acción pura y convertirse en algo con verdadero corazón.
  • Lo peor: Ritmo desigual y un final algo anticlimático.

7. Misión: Imposible II (2000)

Dirigida por: John Woo

La oveja negra de la franquicia. Aunque John Woo intentó dejar su sello con cámaras lentas, palomas volando dramáticamente y tiroteos que parecen coreografías de ballet, el resultado fue más estilo que sustancia. La trama es floja, los diálogos poco inspirados y Ethan Hunt se siente más como una caricatura de héroe de acción que como el astuto espía que debería ser. Incluso sus momentos más espectaculares no logran salvarla del fondo del ranking.

  • Lo mejor: Woo aporta una estética distinta… aunque no siempre funcione.
  • Lo peor: Guion flojo y una historia que se queda corta en intriga.

Por qué nos obsesionan tanto estas películas 

Lo que hace que Misión: Imposible es su negativa a basarse en clichés. Cada entrega reinventa la rueda de las acrobacias, ya sea a través de asombrosas proezas en el mundo real (escalada de un burj, paracaidismo en caída libre, colisiones de trenes) o de giros ultramodernos (IAs deshonestas, agencias desautorizadas, sindicatos clandestinos). Pero más allá de la pirotecnia, es el optimismo inquebrantable de Ethan Hunt, la lealtad a su equipo y su obstinada brillantez lo que nos mantiene invertidos misión tras misión imposible.

Así que preparen las palomitas, despejen la agenda y prepárense para disfrutar del cine más emocionante jamás rodado.