Por Andrea Morales
Cada vez son más los jóvenes que dejan de lado la fotografía digital y se centran en la fotografía análoga.
¿Por qué será? Como típica integrante de la Generación Z, les pregunté a mis seguidores de Instagram. Algunos dijeron que un familiar les introdujo en el mundo de la foto análoga y otros que simplemente les gustaba como se veían las fotos, la estética. Sea cual sea la razón, la fotografía análoga ha vuelto oficialmente.
Para hacer una foto análoga hay que seguir muchos más pasos que con una cámara digital. En primer lugar, hay que elegir. Existen las populares en color, como Portra 400 o Cinestill 800T, o también puedes optar por fotografiar en blanco y negro con un rollo de Ilford HP5 o Kodak TMax 400. Después de elegir el rollo perfecto, ahora tienes que ver con qué cámara vas a disparar. ¿Necesitas una réflex para tener más control, o vas a elegir una cámara de point & shoot y hacerte la vida más fácil? Cuando te des cuenta, ya habrás disparado todo el rollo y habrá llegado el momento del revelado. ¿Escanearás las fotos o también las imprimirás? Las posibilidades de la película son infinitas. Incluso cuando la película ya se ha procesado, puedes sacar los negativos y volver a escanearlos o imprimirlos cuantas veces quieras.
Una de las cosas que más me gusta de la fotografía análoga es la anticipación y la sorpresa. No saber exactamente cómo saldrán las fotos hasta el momento de revelarlas y escanearlas (o imprimirlas) me hace sentir como un niño en Navidad. La cantidad limitada de fotos también hace que uno se piense dos veces qué fotografiar. Con la subida de los precios de los rollos, esto se ha hecho más notable entre quienes disfrutan de esta afición. Hay algo en el hecho de tener sólo 24 o 36 posibilidades de hacer una foto perfecta que hace que cada fotograma sea más especial. En promedio, un rollo me dura al menos un mes en cualquiera de mis cámaras, y lo mismo les ocurre a mis seguidores que respondieron a mis preguntas.
Sorpréndete con la foto análoga, prueba algo nuevo. Si ya eres fotógrafo, prueba la fotografía con película, hay mucho que aprender de ella que se puede aplicar a la fotografía digital. Y como decimos muchos fotógrafos de película, #FilmIsNotDead.
