Por: Gina Dewar
Debo confesar que me sentí triste cuando mi hija me contó sobre la muerte de Liam Payne, uno de los integrantes de la boyband británica ONE DIRECTION.
One Direction fue y sigue siendo (con Harry Styles) una gran parte de la vida de mi hija, y para ser sincera, de la vida de toda la familia. Viajamos a verlos a varias ciudades y disfrutamos haciéndolo.
A medida que pasaba el día, seguí leyendo todas las publicaciones en las redes sociales, esperando una publicación de los otros cuatro miembros de One Direction.
De repente, vi una publicación de Anne Twist, la madre de Harry Styles. Era una simple foto de un corazón roto, con el siguiente texto “Solo un niño”.
Entonces me di cuenta. Como madre de adultos jóvenes, siempre existe este miedo de que les pueda pasar algo porque no siempre estás con ellos.
Estoy tratando de imaginar lo que sintió Anne cuando escuchó la noticia. Hay tantos recuerdos de estos niños juntos en One Direction. Creo que pensó: “Podría haber sido mi hijo”, como hacen la mayoría de las madres. Yo también me sentí así.
Liam tenía solo treinta y un años. “Solo era un niño”.
(Foto de la página oficial de Facebook de «Liam Payne»)
Sé que está bien sentirse triste o molesto. La pérdida de alguien a quien admiramos puede resultar muy personal, incluso si no lo conocíamos en la vida real. Necesitamos validar nuestras emociones y expresarlas a nuestra manera.
Si bien tenemos la intención de celebrar su legado, también me pone un poco triste, como adulta y como madre, que él estuviera luchando contra la adicción y sintiera que no tenía otra opción que escapar de su realidad. Sentía que el mundo estaba en su contra y no puedo imaginar cómo se sintió ese día. Aunque todos cometemos errores, siempre hay una explicación de por qué sucede esto.
Pero debemos centrarnos en el impacto positivo que Liam Payne tuvo en sus fans y en el mundo. Escuchar su música, ver sus videos o incluso crear un pequeño homenaje en su memoria. Celebrar su vida y sus logros puede ser una forma reconfortante de honrar su legado. El duelo puede llevar tiempo y las emociones pueden surgir en oleadas. Conocí a los padres de Liam en la fila para comprar una cerveza en el estadio Qualcomm de San Diego cuando One Direction estaba de gira. Fue una historia divertida porque el puesto de comida no les vendía alcohol porque no tenían ninguna identificación. Les compré la cerveza y no me di cuenta de que eran los padres de Liam hasta que noté que estaban sentados junto a nosotros en el concierto y todos los saludaban y se tomaban fotos con ellos.
Se me parte el corazón solo de pensar en lo que está pasando su familia. Deja atrás a un hijo pequeño y a millones de fans que lamentan su trágica muerte.
Liam Payne cantó “Me parece que cuando muera, estas palabras estarán escritas en mi piedra” (Story of my Life).
Descansa en paz, Liam.
