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Fuente: Facebook Oficial de Donald Trump

La Medida de Trump de Recortar la Financiación de PBS Kids: Lo que Realmente Significa para las Familias Estadounidenses


En un movimiento nocturno que provocó una preocupación generalizada, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva destinada a eliminar la financiación federal para PBS y NPR. Aunque no es la primera vez que Trump apunta a los medios de comunicación públicos, esta acción reciente supone un recorte especialmente profundo, amenazando directamente programas como Plaza Sésamo, Arthur, Daniel Tiger’s Neighborhood y muchos otros en los que millones de familias de todo el país confían cada día.

¿Qué ha ocurrido exactamente? ¿Y por qué es tan importante?

El Papel de la Radiotelevisión Pública en la Vida de los Niños

Durante más de 50 años, PBS Kids ha sido una fuente fiable de programación gratuita y educativa para los niños estadounidenses. Desde «Mister Rogers» hasta «Molly de Denali», los programas de PBS Kids han entretenido y educado a generaciones, especialmente en comunidades desfavorecidas.

Estos programas no sólo entretienen, también enseñan. Respaldados por expertos en desarrollo infantil, los programas de PBS Kids están diseñados para fomentar la alfabetización, las habilidades matemáticas, la inteligencia emocional y la comprensión cultural. Según un estudio, cerca del 90% de los padres creen que PBS Kids es un lugar seguro y fiable para que sus hijos aprendan. Y no es de extrañar: PBS Kids es accesible en el 98% de los hogares estadounidenses, incluidas las zonas rurales donde Internet o el cable pueden ser limitados.

Pero la cuestión es que hacer programas educativos de calidad no es barato. Programas como Lyla in the Loop, Alma’s Way y Elinor Wonders Why han recibido financiación de la Corporation for Public Broadcasting (CPB), que distribuye unos 535 millones de dólares al año a medios públicos como PBS y NPR.

La financiación federal no cubre el coste total de la producción de estos programas, pero desempeña un papel vital. Por ejemplo:

  • Lyla in the Loop recibió 3 millones de dólares
  • Phoebe & Jay también recibió 3 millones de dólares
  • Alma’s Way recibió 1,4 millones de dólares
  • Molly of Denali recibió 1 millón de dólares.

Estas contribuciones pueden parecer pequeñas en comparación con los presupuestos de Hollywood, pero marcan una gran diferencia cuando se trata de mantener el contenido educativo disponible para todos los niños de Estados Unidos, independientemente de su código postal.

La Orden Ejecutiva y su Posible Impacto

La orden ejecutiva de Trump se dirige específicamente al CPB, ordenándole que deje de financiar PBS y NPR por completo. La administración afirmó que la radiodifusión pública se ha convertido en una plataforma para la «propaganda radical, woke» en lugar de noticias imparciales y educación. En resumen, forma parte de un esfuerzo más amplio por desfinanciar instituciones que el ex presidente considera políticamente opuestas a él.

Pero aquí está el truco: La CPB no es una agencia ejecutiva federal que responda directamente ante el presidente. Es una organización sin ánimo de lucro, creada por el Congreso para ser independiente del gobierno federal. Como tal, no está del todo claro si esta orden ejecutiva puede ser aplicada legalmente.

Aun así, las implicaciones son graves. Si la CPB perdiera financiación, las emisoras de radio y televisión públicas locales -especialmente en comunidades rurales, tribales e insulares- serían las más afectadas. Según un estudio de 2023, 26 emisoras locales podrían dejar de emitir por completo, y 23 más podrían tener que reducir sus áreas de servicio. Hasta 46 millones de estadounidenses perderían el acceso a los medios públicos.

Es Algo Más que Entretenimiento

Para muchas familias, PBS Kids es algo más que tiempo frente a una pantalla. Es un sistema de apoyo. Programas como Arthur ayudan a los niños a entender las cuestiones más importantes de la vida: cómo ser un buen amigo, lidiar con la ansiedad o sobrellevar el hecho de tener un padre en el ejército. En un conmovedor episodio, Buster, el personaje de Arthur, invita a los niños a entrar en sus pulmones para explicarles cómo es vivir con asma.

Marc Brown, el creador de Arthur, contó cómo un fan -que estaba en segundo curso cuando se produjeron los atentados del 11 de septiembre- encontró consuelo en su peluche de Arthur aquel terrorífico día. Historias como éstas nos recuerdan que PBS no se limita a emitir dibujos animados, sino que fomenta la resiliencia, la empatía y la esperanza de nuestros espectadores más jóvenes.

La Radiotelevisión Pública en Crisis

Muchos líderes y expertos se han manifestado en contra de la orden ejecutiva. Paula Kerger, presidenta y CEO de PBS, lo calificó de «flagrantemente ilegal» y podría poner en peligro su capacidad de servir al público. Fred Rogers Productions, la empresa detrás de Daniel Tiger’s Neighborhood, se hizo eco de esta preocupación, calificando la financiación de «insustituible y esencial».

La congresista Rosa DeLauro lo expresó sin rodeos: «En lugar de ayudar a las familias a hacer frente al aumento de los costes, [Trump] está eliminando los mismos programas que educan a nuestros hijos y protegen a nuestras comunidades.» Señaló que los medios de comunicación públicos no sólo educan, sino que también proporcionan alertas de emergencia en tiempos de desastres naturales o crisis. En algunas zonas rurales, PBS y NPR son las únicas fuentes fiables de noticias disponibles.

Lo que está en Juego

Si esta orden se mantiene, esto es lo que el país podría perder:

  • Contenido educativo de confianza para niños en edad preescolar y escolar
  • Acceso a programación gratuita y no comercial para familias que no pueden permitirse servicios de streaming o cable
  • Alertas de emergencia durante desastres o cortes de energía
  • Narración local y periodismo que conecta a las personas con sus comunidades

La pérdida de apoyo federal perjudicaría profundamente a las más de 1.500 emisoras de radio y televisión públicas de propiedad local en los 50 estados. Aunque algunas de las emisoras más grandes podrían sobrevivir gracias a donaciones o patrocinios, las más pequeñas -especialmente las que atienden a las poblaciones más vulnerables- no lo harían.

Un Llamado a la Protección de los Medios Públicos

Tanto si haz sintonizado Arthur, Plaza Sésamo o Molly of Denali como si no, es importante reconocer lo que ofrecen los medios públicos estadounidenses: igualdad de acceso a la educación, conexión con la comunidad y una plataforma que refleja las diversas realidades de la vida estadounidense.

La radiotelevisión pública ha estado ahí para nosotros, para nuestros hijos, nuestros padres y nuestras comunidades. Y ahora necesita que nosotros estemos a su lado.

Si crees en la equidad educativa, el acceso a los medios para todos y la preservación de fuentes fiables de información, ahora es el momento de alzar la voz, apoyar a tu emisora local o ponerte en contacto con tus representantes.

Porque si perdemos PBS Kids, perderemos una parte de lo que somos como nación: un lugar donde todos los niños merecen aprender, crecer y soñar.