En todo el país, la gente se reúne el 14 de junio, no para celebrar, sino para hacer oír su voz. En más de 1.500 ciudades, desde grandes metrópolis como Nueva York y Chicago hasta pequeñas poblaciones intermedias, los estadounidenses participan en las protestas “No kings” (No a los reyes), un movimiento cuyo objetivo es rechazar el autoritarismo y exigir un futuro más justo y democrático.
¿Qué hay detrás del movimiento «No Kings»?

Las protestas forman parte de un esfuerzo mayor conocido como 50501: 50 protestas, 50 estados, un movimiento. La fecha es simbólica: El 14 de junio es el Día de la Bandera en E.U., el 250 aniversario del Ejército de Estados Unidos, y el 79 cumpleaños de Donald Trump, un día que, al parecer, se celebrará al estilo militar en Washington D.C. ¿El coste previsto de este desfile? Entre 25 y 40 millones de dólares, algo que muchos críticos consideran una escandalosa malversación de fondos públicos.
En lugar de animar el evento, miles de personas de todo el país están diciendo «basta ya». Se están manifestando para rechazar lo que consideran una peligrosa deriva hacia el autoritarismo y una presidencia centrada más en el poder personal que en el servicio público.
Uno de los lemas de la protesta lo dice todo: “No a los tronos. Sin coronas. No a los reyes”.
¿Dónde tienen lugar estas protestas?

Según los organizadores, más de 1.500 ciudades van a participar. Estamos hablando de grandes centros como Atlanta, Chicago, Houston, Phoenix, Nueva York, Filadelfia y Charlotte, por nombrar sólo algunas.
La hora de inicio y la duración varían según la ciudad: algunos actos comienzan temprano, mientras que otros lo hacen más tarde. Para saber qué actos se celebrarán cerca de tu ciudad, puedes consultar la lista completa en: https://www.nokings.org/
¿Quién organiza las protestas?
La lista de simpatizantes es larga e incluye grupos nacionales como Indivisible, ACLU, MoveOn, Human Rights Campaign, American Federation of Teachers, Common Defense y Stand Up America, entre otras más de 100 organizaciones.
¿Su objetivo? Demostrar que la democracia pertenece al pueblo, no a un hombre o a un partido político.
Voces alzadas
Christina Harvey, que lidera el grupo de base Stand Up America, dice que las protestas son parte de una misión más amplia para luchar contra la supresión de votantes, frenar la corrupción política y detener los esfuerzos para silenciar a la oposición. «Trump está organizando un costoso desfile en lugar de abordar la crisis del coste de la vida», afirma. «Eso no es liderazgo: es ego».
Harvey también señaló las medidas tomadas por Trump y sus aliados que preocupan a muchos: ignorar las decisiones judiciales, intentar castigar a los oponentes políticos y recortar programas vitales como Medicaid, mientras ofrece exenciones fiscales a los ricos.
¿Por qué el pueblo se está poniendo de pie?

Para Sara Sparks, una madre de Washington, las protestas no son divertidas, sino necesarias. «Me pongo nerviosa cada vez que voy», admite. «Pero no puedo quedarme callada cuando sé que algo no está bien». Para ella, manifestarse es una forma de conectar con otras personas que sienten el mismo miedo y frustración por el rumbo del país.
Sara dice que ahora mismo no se identifica con ningún partido político, pero sabe que quiere un futuro en el que sus hijos puedan prosperar en un Estados Unidos justo e integrador. «Tenemos que eliminar, revertir y reclamar», afirma, refiriéndose a lo que considera esfuerzos profundamente arraigados para restringir los derechos y las libertades.
En Rhode Island, Suzette Lefevre, votante independiente y educadora, participa en la marcha por su hijo transgénero de 19 años. Afirma que sentencias recientes, como la que prohíbe a los transexuales entrar en el ejército, son desgarradoras. «Crié a mi hijo para que creyera en la justicia y la igualdad», afirmó. «Tengo que luchar por eso ahora más que nunca».
Mientras tanto, en Pittsburgh, los abogados Holly Feeney y su marido protestan para defender el Estado de derecho. «Creemos en el debido proceso», dijo Holly. “Incluso los indocumentados merecen un juicio justo. Desaparecer a la gente no es algo que deba ocurrir nunca en Estados Unidos”.
Holly, una progresista, ha participado en muchas protestas a lo largo de los años y cree que el Partido Demócrata no ha hecho lo suficiente para contraatacar. «Demasiados de nuestros líderes tienen miedo de levantarse con valentía», dijo. «Necesitamos coraje, no un silencio calculado».
Un impulso pacífico para un cambio real
A pesar de las graves preocupaciones que les mueven, los manifestantes afirman que el movimiento tiene que ver tanto con la esperanza como con la ira. Es una forma pacífica pero poderosa de recordar al mundo que la democracia sigue siendo importante y que la bandera estadounidense pertenece a todos, no sólo a quienes ostentan el poder.
Como dice el sitio web «No Kings»:
“No estamos viendo pasar la historia. La estamos haciendo”.
Fuente: https://www.newsweek.com/donald-trump-protests-flag-day-military-50501-2080899
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