Verónica Macedo encarna el espíritu de la excelencia latina a través de su incansable compromiso con el desarrollo comunitario y su enfoque innovador del trabajo sin ánimo de lucro. Nacida y criada en Ciudad de México, Verónica se embarcó en su viaje profesional con una sólida base en marketing. En 2003 se licenció en Marketing por la Universidad Anáhuac, sentando las bases para una carrera dedicada a tener un impacto positivo.
¡La trayectoria profesional de Verónica comenzó en Yum! Brands, donde perfeccionó sus habilidades de marketing y adquirió una valiosa experiencia en el sector. En 2009, amplió sus conocimientos obteniendo un MBA por la Universidad Estatal de San Diego. Esta formación avanzada la dotó de los conocimientos y el pensamiento estratégico necesarios para impulsar un cambio impactante.
Uno de los logros más destacados de Verónica llegó poco después de terminar su MBA. Fue pionera en el primer programa comunitario de este tipo para padres de San Diego en la República Dominicana. Esta innovadora iniciativa demostró su capacidad para salvar las distancias entre comunidades y proporcionar apoyo esencial allí donde más se necesitaba. Su trabajo con los niños y las comunidades locales no era sólo un trabajo, era una vocación. Despertó en ella una profunda pasión por ayudar a los demás y reforzó su convicción de que todos los niños merecen el mismo cuidado, amor y oportunidades.
Tras una exitosa carrera de más de 15 años en el sector lucrativo, Verónica hizo una transición fundamental al mundo de las organizaciones sin ánimo de lucro. Su cambio fue impulsado por un compromiso profundamente arraigado con la promoción de causas sociales y el apoyo al bienestar de la comunidad. Desde enero de 2021, trabaja como Directora de Desarrollo y Relaciones Comunitarias en CHICANO FEDERATION. En este papel, Verónica es fundamental para asegurar la financiación de la organización, desarrollar alianzas estratégicas e implementar un exitoso programa de ingresos.
Sus esfuerzos aseguran que CHICANO FEDERATION pueda continuar proporcionando servicios críticos y apoyo a las comunidades locales. Las contribuciones de Verónica van más allá de sus logros profesionales. Ella y su marido, Ricardo, tienen tres hijos maravillosos y viven en San Isidro. Su amor por la comunidad es evidente tanto en su vida profesional como personal. La dedicación de Verónica a mejorar la vida de los que la rodean y su compromiso inquebrantable con el fomento del cambio positivo ejemplifican verdaderamente la excelencia latina.
Al rendir homenaje a Verónica Macedo, reconocemos no sólo sus logros profesionales, sino también su profundo impacto en la comunidad. Su liderazgo, compasión y determinación la convierten en un brillante ejemplo de lo que significa sobresalir e inspirar como latina.
