Prepararse para un huracán implica varios pasos para garantizar su seguridad y la protección de su propiedad. Aquí hay algunas pautas a seguir:
1. Manténgase informado: controle las previsiones meteorológicas y las actualizaciones de las autoridades locales para mantenerse informado sobre la trayectoria y la gravedad del huracán.
2. Cree un plan de emergencia: Desarrolle un plan que incluya rutas de evacuación, puntos de reunión designados y contactos de emergencia. Comparta este plan con su familia y asegúrese de que todos lo entiendan.
3. Abastecerse de suministros: Reúna artículos esenciales como alimentos no perecederos, agua, linternas, baterías, botiquines de primeros auxilios, medicamentos y documentos importantes. Tenga suficientes suministros para al menos tres a siete días.
4. Asegure su hogar: Recorte árboles y arbustos, asegure artículos sueltos en su jardín, refuerce ventanas y puertas, y considere instalar contraventanas o madera contrachapada para protegerse contra vientos fuertes. Si se le recomienda hacerlo, corte los servicios públicos como el gas, la electricidad y el agua.
5. Evacuación: Si las autoridades locales emiten una orden de evacuación, sígala inmediatamente. Esté preparado para salir de su hogar y buscar refugio en un lugar seguro tierra adentro lejos del camino de la tormenta.
6. Comunicación: asegúrese de tener una forma de mantenerse conectado durante el huracán, como un teléfono celular cargado, paquetes de baterías portátiles o una radio a batería. Mantenga a mano la información de contacto de emergencia.
7. Precauciones de seguridad: Quédese adentro durante la tormenta y lejos de las ventanas. Evite el uso de velas y use linternas en su lugar. Escuche las noticias locales y los anuncios oficiales para obtener actualizaciones e instrucciones.
Recuerde, cada huracán es diferente y es esencial mantenerse actualizado y seguir las instrucciones proporcionadas por las autoridades locales.